Por KC Royster
Mantener la calma y la firmeza durante conversaciones tensas puede parecer inalcanzable. Pero tenemos buenas noticias: Lili Powell Se explicaron los pasos de las tres lecciones para mantener la atención plena durante la conversación. Es fundamental regular el estado emocional antes de iniciar la conversación y conectar con el presente. Primero, respira hondo, exhala suavemente e inspira curiosidad. Segundo, siéntate o ponte de pie con los pies separados a la altura de las caderas. Luego, siéntate derecho y estira la columna. Relaja los hombros y mira al frente con la mirada relajada. Durante una conversación, controla tu energía y atención mediante la respiración. Esto ayuda a concentrarse durante la conversación.
“Después de haberte transformado y recuperado, estás mejor equipado para redirigir tu atención lejos de lo que ya no eres.respuesta al estrés y su enfoque estrecho hacia una interpretación más generosa de lo que está sucediendo”.
En tercer lugar, cuando la tensión aumente, intenta adoptar una interpretación generosa. Observa cualquier "pellizco" físico o emocional que se produzca. Retoma tu postura relajada y respira profundamente un par de veces. Asegúrate de visualizar un círculo que te rodea a ti y a la otra persona, representando la historia sagrada que comparten. Muestra compasión por ti mismo y por la otra persona comenzando con una charla informal antes de pasar a conversaciones más significativas. Puedes trabajar estas lecciones en ti mismo o en situaciones de la vida real que pasen de diálogos de bajo riesgo a diálogos de alto riesgo. Una vez que las practiques con regularidad, podrás mantener la conversación con una presencia relajada. Recuerda llegar con plenitud, respirar con curiosidad y conectar con una interpretación generosa.