Los adolescentes de hoy se enfrentan a enormes presiones, desde las secuelas de la pandemia hasta el miedo a los tiroteos escolares y el cambio climático. Con tasas de suicidio alarmantemente altas, es crucial encontrar maneras de apoyar su salud mental. Una herramienta poderosa es la autocompasión, que implica ser amable con uno mismo en momentos difíciles. Las investigaciones demuestran que los adolescentes que practican la autocompasión tienen menos probabilidades de sufrir depresión, ansiedad y estrés, y más probabilidades de afrontar los desafíos con resiliencia.
Como Dra. Kristin Neff Notas: «Sabemos, gracias a una amplia investigación, que la autocompasión ayuda a aliviar el sufrimiento. Ahora, debemos afrontar la realidad del sufrimiento de nuestros adolescentes y tomar las medidas necesarias para brindarles los recursos de afrontamiento que sabemos que funcionan, para que puedan superar su propio dolor y alcanzar un futuro de bienestar y salud».
Ser más compasivo con uno mismo proporciona la red de seguridad necesaria para enfrentar aspectos de uno mismo que pueden no gustarle y luego cambiarlos.
Enseñar la autocompasión en las escuelas podría empoderar a los adolescentes a manejar sus emociones y desafíos de manera más efectiva, ofreciéndoles un camino hacia una mejor salud mental.
Los adolescentes de hoy se enfrentan a enormes presiones, que van desde las secuelas de la pandemia hasta la ansiedad por los tiroteos escolares y el cambio climático. Estas tensiones han provocado un aumento significativo de la ansiedad, la tristeza e incluso el suicidio entre los jóvenes. Sin embargo, las investigaciones indican que la autoevaluación...La compasión —la práctica de cuidarse a uno mismo durante momentos difíciles— puede ser una técnica eficaz para combatir estos desafíos. La autocompasión permite a los adolescentes desarrollar resiliencia, afrontar obstáculos sin miedo al fracaso y aumentar su bienestar general. La Dra. Kristin Neff lo expresa: «Necesitamos afrontar la realidad del sufrimiento de nuestros adolescentes y brindarles los recursos de afrontamiento que sabemos que funcionan, para que puedan superar su propio dolor y alcanzar un futuro de bienestar y salud».